Tabla de contenido:
- ¿Cuáles son los signos de una posible persona suicida?
- No hay esperanza
- Sentimientos tristes y malhumorado el extremo
- Problemas para dormir
- Cambios en la personalidad y la apariencia.
- Sentimientos de aislamiento
- Comportamiento de autolesión
- Pensamientos suicidas
- ¿Quién puede suicidarse?
El suicidio no es una enfermedad mental, pero suele ser el resultado potencial de una enfermedad mental grave, que puede incluir depresión, trastorno bipolar, estrés, ansiedad o trastorno postraumático. Alertarse a sí mismo sobre los síntomas comunes del suicidio puede ayudarlo a evitar malas consecuencias y descubrir la causa raíz de sus sentimientos suicidas.
¿Cuáles son los signos de una posible persona suicida?
No hay esperanza
Este es el síntoma más común en personas que padecen depresión. Las personas que piensan en el suicidio a menudo se sienten atrapadas o sin esperanza ante una situación. La falta de esperanza puede hacer que tenga sentimientos negativos sobre las condiciones actuales e incluso expectativas sobre el futuro.
Sentimientos tristes y malhumorado el extremo
Tengo cambios de humor es decir, sentirse extremadamente feliz y profundamente triste al día siguiente. Enfrentar la tristeza durante un período prolongado puede ser estresante. El dolor excesivo es una de las principales causas de las tendencias suicidas.
Problemas para dormir
El sueño es una forma en que el cerebro puede reparar el daño y mejorar su función. Las personas que tienen problemas de sueño prolongados pueden sufrir lesiones cerebrales irreparables. No poder dormir es uno de los riesgos peligrosos asociados con los pensamientos suicidas.
Cambios en la personalidad y la apariencia.
Los cambios en el comportamiento y la apariencia son signos que se observan en una persona que está contemplando el suicidio, como hablar despacio, comer en exceso, sentirse atraído por la muerte o la violencia. Esta persona tampoco prestó atención a su mala apariencia. Algunas personas también experimentan cambios en las rutinas, como los patrones de alimentación o sueño.
Sentimientos de aislamiento
Las personas que planean suicidarse no quieren interactuar con familiares o amigos. Se apartan del contacto social y quieren estar solos. Por lo general, eligen vivir solos y evitar las actividades públicas. Además, también pierden interés en las cosas que solían disfrutar.
Comportamiento de autolesión
Empiezan a tener comportamientos potencialmente peligrosos, como consumir alcohol o drogas en exceso, conducir de forma imprudente o tener relaciones sexuales peligrosas. Parece que les importa menos su seguridad o ya no valoran su vida.
Pensamientos suicidas
La mayoría de las personas que están pensando en suicidarse les dan señales a sus amigos o familiares, como decir adiós a las personas como si no se volvieran a ver. También pueden repetir frases como "solo quiero suicidarme", "si me acabo de morir" o "si nunca he nacido". Pueden prepararse para su muerte, como comprar un arma o recolectar medicamentos, o regalar sus pertenencias o meterse en problemas para que no se pueda encontrar una explicación lógica para el suicidio.
¿Quién puede suicidarse?
La tasa de suicidios varía en diferentes grupos de personas. Los adolescentes, los adultos jóvenes y los ancianos son un grupo que puede experimentar problemas de suicidio. Además, existen varios tipos específicos que tienen un alto riesgo de suicidio, como:
- Personas que padecen enfermedades incurables
- Personas con antecedentes familiares de suicidio.
- Personas con amigos que se han suicidado.
- Personas con antecedentes de víctimas de abuso físico, emocional o sexual
- Personas con depresión prolongada o enfermedad mental.
- Personas solteras, no calificadas o desempleadas
- Personas que han intentado suicidarse antes
- Personas con problemas de drogas
- Personas que interactúan frecuentemente con pacientes incurables
- Las mujeres tienen 3 veces más probabilidades de suicidarse que los hombres
Si está teniendo pensamientos suicidas pero no está pensando en hacerse daño, no debe cerrarse y expresar cómo se siente a los demás. Vaya con amigos o familiares, o busque un consejero o un grupo de apoyo que lo ayude a lidiar con estos pensamientos.
Los sentimientos suicidas no se pueden tratar con un tratamiento médico ordinario, pero se pueden curar con el apoyo de familiares y amigos, así como con el tratamiento de la raíz del problema. Consulte a un médico por un problema importante cada vez que tenga una tendencia suicida.