Tabla de contenido:
Al leer el empaque de alimentos, es posible que haya visto las palabras "fortificado" o "fortificado" seguidas de ciertos nutrientes. Esta escritura se encuentra generalmente en productos lácteos, harinas o cereales. Sin embargo, últimamente también se pueden encontrar alimentos enriquecidos en forma de pan, especias para cocinar e incluso comida para niños.
¿Qué se entiende exactamente por alimentos enriquecidos? Entonces, ¿los alimentos que han pasado por este proceso se vuelven más saludables que los alimentos comunes? Consulte la respuesta en la siguiente información.
Conozca los alimentos fortificados y sus beneficios.
Los alimentos enriquecidos o enriquecidos son una ingesta que se ha agregado con varios tipos de nutrientes que naturalmente no están contenidos en estos alimentos. Por ejemplo, leche enriquecida con vitamina D, cereales enriquecidos con vitamina B, etc.
Además de enriquecer el contenido nutricional de los ingredientes alimentarios, la fortificación también es útil para restaurar los nutrientes perdidos en el proceso de procesamiento. De esa manera, los ingredientes de los alimentos envasados aún contienen los mismos nutrientes que sus materias primas.
De hecho, la fortificación de alimentos se inició desde la década de 1930. El objetivo es prevenir las deficiencias de vitaminas y minerales agregándolos a los ingredientes alimentarios que consumen habitualmente las personas, como la leche y el arroz.
Los nutrientes que se agregan a los alimentos enriquecidos son generalmente micronutrientes, es decir, los nutrientes que el cuerpo necesita en pequeñas cantidades. Aunque se necesitan en pequeñas cantidades, los micronutrientes juegan un papel importante en el desempeño de las funciones normales del cuerpo.
En Indonesia, la fortificación se ha llevado a cabo agregando hierro en la harina de trigo, vitamina A en el aceite de cocina y yodo en la sal. Tiene como objetivo superar retraso del crecimiento , desnutrición y trastornos por deficiencia de yodo en los niños.
Organización Mundial de la Salud afirmó que la fortificación era una forma eficaz de proporcionar nutrientes a la comunidad sin cambios drásticos en la dieta. De hecho, este programa también puede prevenir enfermedades causadas por deficiencias de micronutrientes.
¿Es más saludable la ingesta fortificada?
Los alimentos enriquecidos son muy útiles para prevenir problemas de salud asociados con las deficiencias de micronutrientes. Estos alimentos también son muy importantes para grupos vulnerables como niños, mujeres embarazadas, ancianos y personas con dietas especiales.
Sin embargo, los alimentos enriquecidos también tienen inconvenientes. Este material alimenticio generalmente ha pasado por mucho procesamiento y ha sido empaquetado. Este proceso aumentará el contenido de grasa, sodio y azúcar.
Los niños también corren el riesgo de una ingesta excesiva de vitaminas y minerales si consumen alimentos enriquecidos con demasiada frecuencia. La ingesta excesiva de vitaminas y minerales a largo plazo puede tener un impacto negativo en la salud.
Incluso los adultos pueden experimentar una ingesta excesiva de micronutrientes, especialmente si también toman suplementos con regularidad. El exceso de vitamina A, por ejemplo, puede debilitar la columna vertebral en los ancianos e interferir con el desarrollo fetal de las mujeres embarazadas.
Aun así, los beneficios de los alimentos enriquecidos superan los riesgos. La razón es que la adición de nutrientes no se realiza sin consideración. Los tipos de nutrientes para la fortificación también se han ajustado a las necesidades de las personas de cada país.
La clave es comer una variedad de alimentos. Esto significa que, además de consumir alimentos fortificados, también obtiene una ingesta de alimentos ricos en nutrientes de fuentes naturales. Una dieta variada proporcionará a su cuerpo una variedad de nutrientes, pero aún así equilibrada.
X